Después de una buena comida en los primeros dos lugares, se viene un clásico que no pueden perderse: Cerveza y ceviche. Así que sigan caminando en dirección al Parque Central sobre el Paseo la Sexta. Al llegar a la mitad de la cuadra, verán un rótulo de madera a su lado derecho: Un camarón con el nombre del lugar. Justo debajo, un larguísimo corredor que lleva al restaurante (en ese corredor alguna vez colgaron muchísimas mochilas) y, por último un patio enorme con muchas mesas de plástico que seguramente estarán ocupadas (porque este lugar siempre se mantiene lleno).
Y es que es la verdad: Don Federico Argueta –el dueño de 60 años– es un personaje que atrae a muchísima gente no solo por sus deliciosos y únicos ceviches, sino porque es un maratonista que no se pierde ninguna carrera oficial y entrena más de 100 kilómetros por semana desde hace 12 años. Imaginen la energía de este personaje que tiene 45 años de vender ceviche y más de 10 años de tener su cevichería abierta.
Así que si pueden platicar con Don Fede será lo máximo, sino busquen mesa rápidamente (antes de que se las roben) y disfruten de tres deliciosos Ceviches acompañados de tamalito, galletas, nachos, exprimidor, ajos, aceite, salsas y demás ingredientes que hacen de la presentación algo único y original en Guatemala. Hay de distintos tamaños, así que ustedes pueden elegir el que mas les parezca. Solo recuerden que apenas vamos por la mitad de este Walking Tour y faltan todavía cosas ricas.
Lo bueno es que caminar ayuda a la digestión.